miércoles, 25 de febrero de 2009

HOMENAJE AL PENTA






Desde aquí quiero dar las gracias al Penta por seguir ajeno a las modas y mantenerse fiel a su clientela siguiéndonos ofreciendo la música de los 70- 80 sin duda una de las mejores épocas, la bien llamada movida madrileña.
En el Penta se formaban y deshacian grupos, se escuchaba buena música y aprendimos a disfrutar del recién nacido nuevo Madrid el Madrid de la movida. Uno se sentía parte importante de algo que estaba sucediendo.
El Penta es un lugar entrañable por muchos motivos: las fotografías que decoran sus paredes, los habituales encuentros con algunos de los músicos que en su día hicieron de Madrid una ciudad más divertida y abierta, los infinitos buenos recuerdos que albergan esas modestas cuatro paredes...
Como muy pocos otros bares en la ciudad, el Penta sigue sirviendo de banderín de enganche para cada nueva generación, sigue obsequiando a sus visitantes con generosas sesiones de buena música, refinadas selecciones de buenas canciones que funcionan tan bien ahora como hace un cuarto de siglo, que no dependen mucho más que de la sapiencia del atento pincha discos y del ánimo del personal.
Hoy, como hace veinticinco años, el Penta no es ni más ni menos que un grato lugar de encuentro con los amigos y las canciones.
Y es que El Penta tiene historia

Nació en el año 1976 como Pentágrama y poco a poco fue consolidándose como una de las salas más conocidas y abarrotadas de Madrid donde se reunían todos los artistas de la época. El Penta, como ya es popularmente conocido, ha sobrevivido durante más de 25 años a modas, alcaldes y políticas de gobiernos municipales (no así ocurrió con otras salas como Rock-Ola) y ha visto como varias generaciones de jóvenes y no tan jóvenes, disfrutan entre sus paredes llenas de éxitos y recuerdos. Unas paredes decoradas con viejas entradas de conciertos, fotografías de los grupos más representativos, caricaturas realizadas por los artistas de entonces y el clásico mural del fondo del local, pintado por Teresa, la que fue mujer de Antonio Vega .
El Penta nunca cierra y escuchando sus temas nacionales e internacionales de los años 80 puedes viajar veinticinco años atrás y creer que estás viviendo el verdadero espíritu de la Movida.
Gracias por los buenos ratos, la buena música y la buena gente que parábamos en este lugar.


Penta Bar: C/de Palma, 4 (a escasos metros del mercado de Fuencarral)

1 comentario:

Anónimo dijo...

"Luego por la noche al Penta a escuchar canciones que consigan que te pueda amar" Me debes una copa en el Penta! Muassssssss