La falta de alimentos básicos en Camboya dispara el robo de perros para consumir su carne.
Aunque, tradicionalmente, los camboyanos despreciaban la carne de perro a la que consideraban sucia, el robo de perros para consumir su carne ha aumentado de forma alarmante en el país a causa de la subida de precio de otros tipos de carne, según denunciaron los dueños de estos animales y la Policía.
Bandas organizadas de motoristas acechan en las calles para apresar el mayor número de perros posible, tras lo que salen huyendo a toda velocidad.
Hasta los agentes de policía pierden sus perros, tal y como contaba uno: "Si lo vigilas cada hora cuando sacas de paseo a tu perro, quizá siga donde lo dejaste, pero si te olvidas y lo dejas solo durante dos o tres horas, desaparece", indicó el agente.
Otro camboyano que ya ha perdido tres perros, afirmaba: "Es terrible perder un perro porque son como de la familia, pero todavía es peor cuando sabes que se los van a comer".
No obstante, sorprenden las declaraciones del alcalde de la capital, instando a los ciudadanos a consumir carne de perro para acabar con la superpoblación de estos animales, cuando lo que ocurre es que la gente no puede permitirse pagar otro tipo de carne, debido a los altos precios.
Bueno pues esta es la noticia que me ha llamado la atencion, no tanto por el hecho, sino por que surge una pregunta: ¿qué haríamos nosotros si tuviéramos hambre o, aún peor, si viéramos a nuestros hijos morir de hambre? Aunque suene fuerte, creo que haríamos lo mismo, no sé, júzguenlo ustedes.
Lo que sí es denunciable, creo yo, es que se roben perros para sevirlos en restaurantes de lujo o, como pasó en España, en concreto, en Madrid, que hace unos años un restaurante estuvo vendiendo chuletas de perro como si de cordero se tratase, o como en algunos pueblos de Castilla, que el día de los quintos se sacrificaban gatos para comerlos en las peñas.
Aunque, tradicionalmente, los camboyanos despreciaban la carne de perro a la que consideraban sucia, el robo de perros para consumir su carne ha aumentado de forma alarmante en el país a causa de la subida de precio de otros tipos de carne, según denunciaron los dueños de estos animales y la Policía.
Bandas organizadas de motoristas acechan en las calles para apresar el mayor número de perros posible, tras lo que salen huyendo a toda velocidad.
Hasta los agentes de policía pierden sus perros, tal y como contaba uno: "Si lo vigilas cada hora cuando sacas de paseo a tu perro, quizá siga donde lo dejaste, pero si te olvidas y lo dejas solo durante dos o tres horas, desaparece", indicó el agente.
Otro camboyano que ya ha perdido tres perros, afirmaba: "Es terrible perder un perro porque son como de la familia, pero todavía es peor cuando sabes que se los van a comer".
No obstante, sorprenden las declaraciones del alcalde de la capital, instando a los ciudadanos a consumir carne de perro para acabar con la superpoblación de estos animales, cuando lo que ocurre es que la gente no puede permitirse pagar otro tipo de carne, debido a los altos precios.
Bueno pues esta es la noticia que me ha llamado la atencion, no tanto por el hecho, sino por que surge una pregunta: ¿qué haríamos nosotros si tuviéramos hambre o, aún peor, si viéramos a nuestros hijos morir de hambre? Aunque suene fuerte, creo que haríamos lo mismo, no sé, júzguenlo ustedes.
Lo que sí es denunciable, creo yo, es que se roben perros para sevirlos en restaurantes de lujo o, como pasó en España, en concreto, en Madrid, que hace unos años un restaurante estuvo vendiendo chuletas de perro como si de cordero se tratase, o como en algunos pueblos de Castilla, que el día de los quintos se sacrificaban gatos para comerlos en las peñas.
6 comentarios:
lo que hace la necesidad
las imagenes son esclarecedoras
bueno es conocer estas cosas
un saludo
Pues si es bueno conocer estas cosas, para asi apreciar lo que tenemos.
Un saludo y gracias por el comentario Jose.
Impresionante, las imagenes hablan solas.
Pues si Eduardo ya se sabe, cuando el hambre aprieta...Casi todo vale.
Un saludo y gracias por tu visita.
Seguramente, si el hambre apretase tanto aqui en España seguramente comeríamos perros, gatos y otros animales que es mejor no nombrar.
Afortunadamente aún nos queda Cáritas con sus comedores sociales donde por el momento muchísimas familias que se han quedado sin nada debido a esta crisis pueden seguir llevándose un trozo de pan a la boca.
Muy buen artículo.
Pues si, esperemos que no lleguemos a esos extremos.
Gracias por tu comentario y un saludo.
Publicar un comentario